¡¡¡JAJAJAJA!!!
Otra nueva causa prefabricada. Los rebeldes adolescentes ya estaban empezando a inquietarse...
Comparto tus argumentos en cuanto a la hipocresía de montar la pataleta, mientras las "cosas de mayores" transcurren al margen con total normalidad. Pero creo que puestos a hablar de hipocresía, aquí hay tela marinera...
Yo conocí el conflicto existente entre China y Tíbet cuando tenía 12 años. Entonces supe que ya venía de lejos. También venía de lejos la respuesta violenta del gobierno chino a las manifestaciones pacifistas de los tibetanos.
Entonces, ¿por qué ahora?
Ahora, con motivo del aniversario de la rebelión del Tíbet que blablablá, se organizaron manifestaciones masivas que tuvieron como respuesta por parte del gobierno una represión violenta que causó X muertos y heridos. Proporcionalmente a la magnitud de las revueltas, el empleo de la violencia es equivalente al habitual. Simplemente, eso.
Por lo tanto, deduzco que los que alientan al boikot AHORA, una de dos:
- O no saben que se trata de un ejemplo puntualmente intensificado de algo que lleva décadas ocurriendo,
- o tienen otro tipo de intereses en ese boikot, completamente ajenos a esos derechos humanos tan manidos.
Dado que vivimos en la época en la que vivimos, en la que todos (los primermundistas) tenemos acceso a una información básica, en un alarde de confianza en el prójimo, voy a suponer que los boikoteadores no vivían en una cueva hasta el mes pasado. Por lo tanto, me decanto por la segunda razón.
A propósito, el otro día vi un minireportaje en algún informativo, que hablaba de que China, en los últimos años, estaba cambiando su imagen y abriéndose al mundo a una velocidad impresionante por medio de una emergente y poderosa incursión en el arte (amén), en la producción de calidad (quitándose el sambenito de superproductor de baratijas), y en la ciencia y la tecnología más vanguardista. La culminación de esta renovación, según el reportaje, sería la celebración de los JJOO.
Bien, entonces tenemos lo siguiente:
- Un poderoso país asiático y comunista (a su manera, poco ortodoxa, pero igual de "malvado" y peligroso para los detractores de esta idelogía), que deja atrás sus lastres sociales y se adentra pisando fuerte en la vanguardia tecnológica y cultural.
- Un evento celebrado en ese país que podría suponer la cosolidación de su nueva posición de poder a nivel mundial.
- Un incipiente movimiento de rechazo hacia este país de carácter estrictamente social, impulsado con muchísima fuerza y que goza de un gran difusión en los medios, influyendo notablemente en la opinión pública.
- Un próspero comercio entre China y occidente, que cada vez goza de mayor importancia para ambas partes, y no se ve en absoluto afectado por el movimiento de repulsa hacia el Gigante propiciado por doquier .
Vamos a atar cabos:
¿A quién beneficia todo esto?
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